Este jueves Hugo Sánchez, en su columna ‘Ajo y Agua’ del
periódico El Universal, compartió su sentir sobre su salida de la dirección
técnica del Pachuca, hablando fuerte de la directiva de los Tuzos.
Afirma que se sintió desilusionado al saber de su cese pues
en los Tuzos siempre han sido respetuosos de los tiempos y los proyectos y en
esta ocasión a él no le dieron la continuidad, a pesar de que apenas había
llegado y el equipo sufrió una renovación que apenas iban asimilando.
Después Hugol dice que se siente utilizado, que su liderazgo
era fuerte y por ello otros personajes de la institución se sintieron
amenazados por lo que se deshicieron de él, además de que su imagen fue
sobreexplotada pues lo llevaron a muchos eventos que nada tenían que ver con lo
deportivo.
El Pentapichichi también señala que en estos meses se dieron
cuenta de las necesidades del club y ya las tenían puntualizadas, pero no se
les otorgó la oportunidad de continuar, comentando que en Pumas le costó varias
temporadas afianzarse y dar resultados.
Igual de interesante que Sánchez afirma que únicamente pidió
como refuerzo a Joaquín Larrivey y la continuidad de Segundo Castillo, pero la
directiva le dijo que no tenía dinero para traer al delantero.
Analizando las palabras de Hugo Sánchez, estoy de acuerdo
con él. En primera instancia tiene razón en que la directiva respetó otros
procesos, como el de Guillermo Rivarola, Pablo Marini o Efraín Flores a pesar
de que en su primera temporada no dieron los resultados esperados, y el suyo no
a pesar de tener contrato vigente y un proyecto de dos a tres años. Creo que
era esperado el desempeño de los Tuzos en esta campaña luego de sufrir una
renovación y del arribo de varios jugadores que apenas iban a adaptarse al
club, o inclusive al futbol mexicano como Nery Castillo o el español Raúl
Tamudo.
Como lo he dicho en otros espacios, en lo personal hubiera
dejado a Hugo, pues apenas conoció el entorno de la institución blanquiazul y
ya conocía los puntos flacos de su plantel, por lo que en este receso tenía la
oportunidad perfecta de trabajar en esos aspectos y reforzar lo que fuera
necesario. Con la llegada de Gabriel Caballero si se tendrá continuidad, pero
los jugadores deberán acostumbrarse a otro tipo de trabajo con un nuevo cuerpo
técnico.
En el siguiente punto que aborda Hugo acerca de que se
sintió utilizado y su imagen fue sobrexplotada también coincido totalmente pues
los directivos lo llevaban a eventos políticos, sociales, empresariales y demás
que nada tenían que ver en lo deportivo, pero al ser el mejor futbolista que ha
dado este país su presencia realzaba esos eventos.
Desde su llegada la mercadotecnia estuvo a tope. Su
presentación al estilo europeo en el estadio Hidalgo ante más de ocho mil
aficionados es el mejor ejemplo de esto, al igual que la presentación del
equipo en el auditorio Gota de Plata pues nunca se habían realizado esos
eventos.
La cobertura de los
medios nacionales e internacionales fue para destacarse en este torneo. Pachuca
solo tiene tal impacto cuando está en las finales, pero durante este Apertura
2012 tuvo un sinnúmero de portadas y espacios en programas de radio y
televisión gracias al morbo que provocó el regreso de Hugo a México y como le
iría en el banquillo tuzo.
A todo esto se refiere Hugo y sin duda Jesús Martínez y
compañía sacaron provecho de la imagen del Pentapichichi para beneficiarse,
aunque también Sánchez debió hacer más en la cancha y sus palabras tendrían aun
mayor credibilidad.
El ‘Macho’ también comparte que únicamente pidió al atacante
argentino Joaquín Larrivey como refuerzo, además de la continuidad de Segundo
Castillo. Argumenta que le dijeron que no había dinero para traer al delantero,
pero me llama la atención que haya traído a tantos jugadores y gastado
alrededor de ocho millones de dólares y no hayan traído a Lavirrey, que según
el sitio alemán Transfermarkt, está tasado en un millón de euros.
Hay que esperar la reacción de la directiva de los Tuzos
sobre estas declaraciones de Hugo, las cuales sin duda dejan muchas cosas para
opinar.
