LAS FIGURAS INVESTIDAS EN UNA FOTO HISTÓRICA
Muy emotiva resultó la histórica Ceremonia de Investidura 2011 del Salón de la Fama del Futbol.
Una fiesta del futbol, no sólo mexicano, sino mundial, que fue el pretexto para reunir a cientos de futbolistas, directivos, periodistas y demás gente de futbol, además de aficionados, que pudieron presenciar un momento que va directo a los anaqueles de la historia.
En lo personal, me gustó mucho ver a tanta figura del futbol, pues además de los ídolos que ahora viven en el recinto futbolero, asistieron grandes jugadores como el uruguayo Carlos María Morales (goleador del Toluca a finales de los 90´s), el brasileño Arlindo Dos Santos (anotador del primer gol en el estadio Azteca), Alberto García Aspe (figura de Pumas y América, entre otros equipos), Félix Fernández (arquero del Atlante campeón en 1992), entre otros.
Fue una emoción inmensa cuando entraron los hombres leyenda del futbol, hombres que lograron que este deporte sea el más practicado y el más seguido en México y en el mundo. Increíble la fortaleza de don Nacho Trelles, que a sus 95 años estuvo presente, la entereza de don Raúl Cárdenas, el carisma de Jorge Campos, la tristeza de Carlos Reinoso por el duro momento familiar que atraviesa pero que a pesar de ello estuvo presente, la sonrisa que después se convertiría en lágrimas de emoción por parte de Salvador Reyes y Evanivaldo Castro Cabinho, los dos únicos futbolistas que han jugado 5 copas del mundo por primera vez juntos: Antonio `Tota´ Carbajal y el alemán Lothar Matthaus , la elegancia de Enrique Borja, el porte de José Saturnino Cardozo y la gran personalidad de Hugo Sánchez, que se llevó las mayores ovaciones de la noche.
Como un magnífico agregado, llegaron tres de los futbolistas mexicanos íconos en la actualidad y dignos representantes en el futbol europeo: Guillermo Ochoa, Giovani Dos Santos y Javier `Chicharito´ Hernández, quienes también arrancaron muchos aplausos.
Cuando cada uno de ellos pasaron a dar su discurso y agradecer, y algunos de ellos no poder contener las lágrimas por el éxtasis del homenaje recibido, fue un instante maravilloso y muy emotivo para todos los presentes en el Auditorio, aunque me imaginó que fue igual para quien lo haya seguido por televisión.
Una noche histórica para el balompié mundial, con una constelación de estrellas reunidas para recibir un merecido reconocimiento a su impresionante trayectoria en las canchas, donde dejaron sudor, pasión, destreza, habilidad, lo que los convirtió en ídolos de las multitudes y, posteriormente, en leyendas.
Un aplauso para quienes tuvieron la iniciativa de crear este recinto y poder reconocer a esas figuras en vida, sin dejar de lado a los que se adelantaron en el camino pero que también fueron homenajeados.
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